Si hay algún medio de comunicación por el que tenga más afecto que por la Internet, esa es la Radio. Y si hay algún medio de comunicación en Colombia que a pesar de la invasión extranjera, la globalización de las comunicaciones y la unificación de contenidos, ha sabido mantener unos estándares medianamente decentes y unos niveles de calidad harto respetables, esa es la Radio. En Colombia se hace buena radio.
En Bogotá que es la ciudad donde he gastado la mayor parte de mi vida hay emisoras de todos los sabores. En mi casa, por decir algo, los Domingos era sagrado levantarse sintonizando historias de Bogotá en el programa Buenos Días Domingo de Radio Santa Fe, que algunos años después seguía oyendo mientras cambiaba del AM al FM para escuchar el Desayuno con los Beatles de Andrés Duran en la ahora extinta 88.9. No me importaba esperar ese programa del Sábado en las tardes con repetición los Miércoles a las 6 PM en la emisora de la Universidad Nacional que se llamaba Imaginarios del Rock, y en el cual Diana Uribe nos contaba historias del Rock mucho antes de que nos contara la historia del mundo en RadioNet y ahora en Caracol. Los Sábados también, en los comienzos de la Emisora Joven de la Radiodifusora Nacional de Colombia (hoy en día Radiónica), saber de la vida de John Lennon, Rod Stewart o The Rolling Stones en voz de Sandro Romero Rey y Daniel Casas era la orden del día, luego Eduardo Arias tomó el espacio y entonces teníamos historias de Joy Division, The Jam, The Who (los hooligans del Rock), Pink Floyd (los arquitectos del Rock), Velvet Underground, The Smiths, The Clash, Roxy Music, David Bowie y algunos otros. Gustavo Gómez educó a muchos Beatlemanos por medio de la emisora de la Universidad Javeriana, eso, cuando Gustavo Gómez no se tomaba el café en el mismo pocillo de Dario Arizmendi. Y hablando de Beatlemanos, es imposible no hacer mención a los programas de Manolo Bellón, recuerdo que uno muy completo fue emitido hace unos 14 años y que era patrocinado por Chivas Regal. Tampoco olvidar los programas dedicados a The Beatles del profesor Ogliastri de la Unal, que a decir verdad eran algo aburridos, pero muy bien documentados.
Tenía también como hábito oír en Radio Súper el programa de Iván Mejía, muchos años antes del Pulso de Fútbol que hace hoy en día con el Doctor Hernán Peláez, porque persona de radio que se respete, le dice Doctor a Hernán Peláez. Eso por hacer referencia a una sola de las tantas cosas que la radio ha ofrecido en materia deportiva. Ni hablar del ciclismo en los ochentas, quizá una de las tribunas deportivas donde el periodismo y la inmediatez informativa hicieron toda una escuela.
Siempre he tenido problemas para dormir, y antes, ahora y después de la Internet siempre estuvo, está y estará la radio. Programas de historias, tangos, boleros, salsa, de todo hay en el dial. Incluso hablar del AM, luego de toda la proliferación de emisoras religiosas en los noventa, sigue ofreciendo buenas opciones, por lo menos en términos de información y opinión.
Podría quedarme mucho más con ustedes recordando cosas de la radio, porque hay muchas cosas, y podría tener más si fuera más viejo. Pero para nadie es un secreto ni mucho menos un misterio que desde hace muchos años las cosas se están convirtiendo en una cosa grande que se llama Internet, entonces los periódicos tienen podcasts y video, las emisoras tienen blogs y columnas de opinión. Y algo imperdonable, que ya es viejo y así suene trillado, es el asunto del rostro detrás del micrófono. Con esos de los sitios Web, ahora es común publicar la foto de esas 'voces detrás del micrófono', no es necesario mencionar que eso en los días de la única y tradicional radio era algo misterioso que hasta podía llegar a tener algo de fetiche, pero hay que decir que ahora entiendo mucho más por qué los de radio no se dedicaron a la televisión, son muy feos.
Adenda: Esta entrada en el blog era para hablar sobre el nuevo sitio de Caracol Radio, que se suma también a la renovación que tuvo la página elespectador.com, a la nueva etapa que se viene para futbolred.com y también para el renovado sitio de Radiónica. Hay que felicitar a la gente detrás de esto, pues en materia de medios de comunicación, Colombia por fin está entrando al año 2000. Por cierto, Gustavo Gómez tiene blog en Caracol y nos identificamos mucho con el nombre escogido para su bitácora, y Manolo Bellón también tiene blog. Vamos a ver cómo sale todo.
En Bogotá que es la ciudad donde he gastado la mayor parte de mi vida hay emisoras de todos los sabores. En mi casa, por decir algo, los Domingos era sagrado levantarse sintonizando historias de Bogotá en el programa Buenos Días Domingo de Radio Santa Fe, que algunos años después seguía oyendo mientras cambiaba del AM al FM para escuchar el Desayuno con los Beatles de Andrés Duran en la ahora extinta 88.9. No me importaba esperar ese programa del Sábado en las tardes con repetición los Miércoles a las 6 PM en la emisora de la Universidad Nacional que se llamaba Imaginarios del Rock, y en el cual Diana Uribe nos contaba historias del Rock mucho antes de que nos contara la historia del mundo en RadioNet y ahora en Caracol. Los Sábados también, en los comienzos de la Emisora Joven de la Radiodifusora Nacional de Colombia (hoy en día Radiónica), saber de la vida de John Lennon, Rod Stewart o The Rolling Stones en voz de Sandro Romero Rey y Daniel Casas era la orden del día, luego Eduardo Arias tomó el espacio y entonces teníamos historias de Joy Division, The Jam, The Who (los hooligans del Rock), Pink Floyd (los arquitectos del Rock), Velvet Underground, The Smiths, The Clash, Roxy Music, David Bowie y algunos otros. Gustavo Gómez educó a muchos Beatlemanos por medio de la emisora de la Universidad Javeriana, eso, cuando Gustavo Gómez no se tomaba el café en el mismo pocillo de Dario Arizmendi. Y hablando de Beatlemanos, es imposible no hacer mención a los programas de Manolo Bellón, recuerdo que uno muy completo fue emitido hace unos 14 años y que era patrocinado por Chivas Regal. Tampoco olvidar los programas dedicados a The Beatles del profesor Ogliastri de la Unal, que a decir verdad eran algo aburridos, pero muy bien documentados.
Tenía también como hábito oír en Radio Súper el programa de Iván Mejía, muchos años antes del Pulso de Fútbol que hace hoy en día con el Doctor Hernán Peláez, porque persona de radio que se respete, le dice Doctor a Hernán Peláez. Eso por hacer referencia a una sola de las tantas cosas que la radio ha ofrecido en materia deportiva. Ni hablar del ciclismo en los ochentas, quizá una de las tribunas deportivas donde el periodismo y la inmediatez informativa hicieron toda una escuela.
Siempre he tenido problemas para dormir, y antes, ahora y después de la Internet siempre estuvo, está y estará la radio. Programas de historias, tangos, boleros, salsa, de todo hay en el dial. Incluso hablar del AM, luego de toda la proliferación de emisoras religiosas en los noventa, sigue ofreciendo buenas opciones, por lo menos en términos de información y opinión.
Podría quedarme mucho más con ustedes recordando cosas de la radio, porque hay muchas cosas, y podría tener más si fuera más viejo. Pero para nadie es un secreto ni mucho menos un misterio que desde hace muchos años las cosas se están convirtiendo en una cosa grande que se llama Internet, entonces los periódicos tienen podcasts y video, las emisoras tienen blogs y columnas de opinión. Y algo imperdonable, que ya es viejo y así suene trillado, es el asunto del rostro detrás del micrófono. Con esos de los sitios Web, ahora es común publicar la foto de esas 'voces detrás del micrófono', no es necesario mencionar que eso en los días de la única y tradicional radio era algo misterioso que hasta podía llegar a tener algo de fetiche, pero hay que decir que ahora entiendo mucho más por qué los de radio no se dedicaron a la televisión, son muy feos.
Adenda: Esta entrada en el blog era para hablar sobre el nuevo sitio de Caracol Radio, que se suma también a la renovación que tuvo la página elespectador.com, a la nueva etapa que se viene para futbolred.com y también para el renovado sitio de Radiónica. Hay que felicitar a la gente detrás de esto, pues en materia de medios de comunicación, Colombia por fin está entrando al año 2000. Por cierto, Gustavo Gómez tiene blog en Caracol y nos identificamos mucho con el nombre escogido para su bitácora, y Manolo Bellón también tiene blog. Vamos a ver cómo sale todo.
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