de sietes: The Rolling Stones - Between The Buttons (1967)

Situarse como músico en 1967 es complicado, más complicado aún es situarse como músico pop en ese mismo año, pero situarse en 1967 como músico pop, británico y con un buen prestigio ganado es estar en líos. Cualquiera en el universo musical se hubiera sentido intimidado cuando apenas un año antes el mundo, el cielo y el infierno firmaban un contrato a término indefinido con discos como Pet Sounds de The Beach Boys, Revolver de The Beatles, A Quick One de The Who, Face to Face de The Kinks, Blonde on Blonde de Bob Dylan y el mismo Aftermath de The Rolling Stones. Así que 1967 se presentaba como la verdadera opción para superar, mejorar, continuar y hacer mucho más valioso el legado de la música popular. Cosa que se hizo muy bien y de qué manera.

Between The Buttons es un disco extraño dentro de todos los trabajos de The Rolling Stones. Fue por un tiempo un disco muy criticado pues no guardaba de forma tan evidente ese toque blues que tanto gustaba de sus otros discos, pero en cambio si reflejaba muy bien el sentir de esos días en la música pop. Para muchos es como si los Stones se hubiesen dejado influenciar por algunos de los discos ya mencionados. Intentando ser parte de la psicodelia y a su vez más cercanos a sus coterraneos que hacían la British Invasion a mediados de los 60. No importa las razones. Lo realmente apreciable es que el grupo de Jagger y Richards logran uno de los mejores discos dentro de la discografía Stoneana y de toda la década de los 60 en general. Trabajo en el que es muy evidente la mano de dos de las personas más importantes e influyentes para los Stones en los sesenta, por una parte está Brian Jones, quien gustaba mucho de hacer experimentos con instrumentos y diferentes sonidos, y por otro lado está el muy chapineruno y gran productor de la banda por esos días, Andrew Loog Oldham. El disco fue lanzado en Inglaterra junto a un soberbio sencillo que tenía las canciones Let's Spend The Night Together y el majestuoso Ruby Tuesday. Estas dos canciones fueron incluidas en la versión que salió del album en Estados Unidos.

Para mencionar algunas de las joyas que se encuentran en este disco podríamos empezar con la canción de arranque del álbum, ese hipnótico Yesterday's Papers, que al lado de Cool, Calm, and Collected se antojan como los experimentos más claros de psicodelia de este álbum. Connection parece una continuación del Dr. Robert de The Beatles y Something Happened To Me Yesterday parece un cruce aleatorio entre cualquiera de las canciones del Blonde on Blonde con alguna del Revolver. Backstreet Girl es otra de esas baladas acústicas tan maravillosas y hermosas de los Stones. De mis canciones favoritas de este disco están Complicated, Who's Been Sleeping Here que me parece una versión primaria del también muy stoneano Shine A Light. La batería muy marcada, la progresión muy psicodelica que crean el piano y el riff de guitarra en My Obsession hacen de ésta una de esas joyas escondidas de los Stones, a mí parecer una canción magistral y la mejor del álbum. Y qué decir del sencillo de acompañamiento del álbum, cualquier cosa que se tenga que agregar a lo dicho de Let's Spend The Night Together y Ruby Tuesday será poco para lo que estas dos piezas de la música son.

Los dejo entonces con el álbum completo y el single ya mencionado. Un trabajo más para reseñar en esta serie de discos de los años terminados en siete, un disco por el que siento mucho afecto y que sea el momento para declarar abiertamente que reclamo como propio a Between The Buttons y que se le dé el lugar que merece dentro de los Beggars Banquets y Let it Bleeds.


the rolling stones - between the buttons

7 comments:

N.Santamaría dijo...

Oigame, y yo que creia que lo de cantarle al periodico de ayer era invencion de H.Lavoe, jejeje.

Que vivan los sietes!

Ivonne dijo...

Es cierto, el Between The Buttons fué de cierta manera de un sonido más 'popular' (recordar hippismo, rock & roll puro). Éste es uno de mis discos favoritos, por encima del let it Bleed. Creo que la canción más representativa de lo que ellos querían lograr con ese disco fué Shine a Light, una de mis favoritas, y claro mi joya :) Ruby Tuesday.

Me gustan éstas reseñas de discos de hace tiempo, siempre es bueno desempolvar cosas para que la gente recuerde que hay buena música todavía. un saludo!

Alex dijo...

no había escuchado un disco completo de los stones que tuviera más de 10 años (salvo compilados) y sí, los años 7 son buenos, me quedo esperando la reseña del low :P

Anónimo dijo...

Una joyita de los Stones, indiscutiblemente, aunque me gustan más en el Beggars Banquet, del año siguiente.

El '77 me parece cada vez más importante, pero es cierto,hacer buena música en el '67 era cosa seria (así que me lo pido, comenzando por el Low).

Equipo radiónica dijo...

Y yo que también aprecio ciertas cosas de los stones, le comento que este fue uno de esos deliciosos ejemplares de ellos que me conseguí por 15 mil pesos en una tienda bogotana. Las ediciones así en bonito estuche, todo por un buen precio. Increíble....

Saludos bogotanos.

"Mr. Stoned" dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

de 1967 es tb el debut de los enormes DOORS!!